Homenaje: La Galera, el auto más ganador del Turismo Carretera, tendrá su propia versión dakariana

Mucho tiempo antes de que el Dakar llegara a Sudamérica para atravesar los caminos de la Argentina, Chile, Perú y Bolivia, el Turismo Carretera se animó a realizar competencias tan extenuantes como esta aventura creada por el francés Thierry Sabine en 1979. Dentro de las carreras más emblemáticas realizadas por el TC en sus primeros años se destacan el Gran Premio de la América del Sur de 1948, que hizo que los competidores fueran desde Buenos Aires a Caracas (Venezuela), y el Gran Premio Dos Océanos, que en 1965 le permitió a la popular categoría atravesar la cordillera de Los Andes para llegar a territorio chileno.

Aquella prueba que unió el Atlántico con el Pacífico fue ganada por una pareja de hermanos: Dante y Torcuato Emiliozzi, quienes ganaron arriba de una cupecita Ford apodada como La Galera. Este vehículo, preparado íntegramente por ellos en su taller de Olavarría, es uno de los más emblemáticos del TC al punto de ser el más ganador de la categoría con 42 victorias (siembre en manos de los Gringos).

Casi cinco décadas después de esa proeza de los Emiliozzi, que en ese año ganaron su cuarto y último título teceísta consecutivo, La Galera intentará nuevamente unir los dos océanos. En realidad, se trata de un buggy inspirado en el famoso auto. Su piloto será el Gato Barbery, un periodista olavarriense que siempre tuvo a Dante y Torcuato como sus referentes. La Galerita, como fue bautizado el pequeño auto dakariano, movilizó a toda la localidad bonaerense. Eso se pudo comprobar durante la presentación y la primera puesta en marcha, que se realizó ante una multitud.

Para Barbery será el cuarto Dakar. Los tres anteriores los realizó en la categoría motos. Abandonó en 2011 y 2012, pero terminó en 2013. Así cumplió un anhelo: entregarle la medalla que se les otorga a los que llegan a la familia de su amigo Jorge Martínez Boero, quien falleció el año anterior a poco de largar desde Mar del Plata.

La construcción del buggy demandó varios meses y aunque se llegó al Dakar con poquísimos kilómetros de prueba, Barbery y su equipo están listos para trabajar duro e intentar terminar la carrera más dura del mundo. Sin dudas, un gran homenaje para los Emiliozzi y su Galera.

Fuente: RED BULL